Todas las mañanas uno de ellos partía en la canoa, en busca de pesca y el otro se internaba en el bosque para algún pequeño animal o algunos frutos. Al atardecer se reunían y gozaban el privilegio de la paz... y vieron que la paz , no era otra cosa que un tiempo sin fronteras para escuchar y gozar la música de los pájaros y los colores del cielo y del mar.
Cuando se reunían Cazador que había sido ilusionista deleitaba a su amigo pescador con los mismos juegos de siempre y este se dormía en el universo del asombro... Hasta esa noche , veinte años después del primer día en que la baraja los había salvado de la desesperación, Cazador se dio a la tentación, por arraigar su propia vanidad le enseño las trampas a su amigo, le mostró los hilos de las marionetas... luego se separaron, sin hablar.
Al dia siguiente Cazador espero a su amigo pescador como todas las noches...Y cuando se hizo de verdad de noche ,supo que Pescador no volvería jamas...Era un hombre que no podia vivir sin ilusiones y las habia ido a buscar, donde comenzó la vida, en los azules y arcanos secretos de lo profundo del mar
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